Nate Diaz provoca una pelea en un reality show ruso
Nate Diaz lo ha vuelto a hacer: provocar el caos lejos de la jaula. Mientras rodaba ALF Reality en Tailandia, un programa ruso parecido a The Ultimate Fighter, el californiano de Stockton, estrella de las MMA, se encontró en el centro del escenario, pero esta vez para una salvaje reyerta fuera de guión. Junto a Jon Jones como capitán del equipo, la aparición de Díaz estaba destinada a añadir fuego al espíritu competitivo. ¿Y qué añadió en su lugar? El caos. Nate Diaz provoca una pelea en un reality show ruso.
Cuando las palabras se convirtieron en guerra
Mientras las cámaras rodaban, las tensiones estallaron. Un compañero se acercó a Díaz dentro de la casa, lanzándole pullas y afirmando que era un “gángster”. Nate, inmerso en una discusión con Jon Jones, lo ignoró, hasta que las cosas se intensificaron. El instigador agarró a Díaz, provocando una pelea en la que intervinieron su entrenador Jake Shields e incluso el círculo íntimo de Díaz.
En un vídeo publicado por Shields en X.com, puedes ver cómo vuelan los puños cuando un participante ruso intenta golpear al californiano de Stockton. Shields admite que al principio no estaba prestando atención: “Eso es cosa mía. Por suerte, nuestro chico José estaba mirando. Intervino cuando la cosa se calentó”.
Detrás de la reyerta
Según Shields, el enfrentamiento se extendió a otras partes de la casa. A pesar de la agresión, Díaz decidió no continuar la pelea. Los productores del programa intentaron intervenir, pero el caos siguió desarrollándose.
“Me dijeron que los luchadores me atacaron. Pero está claro que también estaban implicados el personal y la tripulación”, dijo Díaz. “Había más de cien chechenos y daguestaníes allí. Pensé… quizá no luches contra cien tipos en una isla remota”.
Guerrero incomprendido: Quién es realmente Nate Diaz
El verdadero problema de esta historia no es la pelea, sino la incomprensión de los medios de comunicación sobre quién es realmente Nate Diaz. Demasiado a menudo se le reduce a un meme: un luchador impulsivo que abofetea a la gente en vídeos virales, enmarcado como un “cholo” caricaturesco por los tabloides del cotilleo y los titulares sensacionalistas. Pero esa imagen es una distorsión, lejos de la imagen completa.
Nate Díaz es cinturón negro de 3er grado en Jiu-Jitsu brasileño bajo la dirección de César Gracie. Es licenciado en Biología por la Universidad de Florida Central y tiene un máster en Nutrición y Dietética por la Universidad Internacional de Florida. Más allá de la jaula, es propietario de un negocio, socio de un gimnasio y un comprometido defensor del Jiu-Jitsu y de los deportes juveniles, tanto a nivel local como mundial.
Se trata de un hombre que sabe cómo sortear el caos. Tanto si se trata de interrumpir una pelea callejera como de participar en campañas benéficas para recaudar dinero para las víctimas de la violencia doméstica, Nate Díaz está profundamente vinculado a su comunidad. Familias enteras acuden a su gimnasio, no sólo para entrenar, sino para recibir orientación, protección y esperanza.
Por ejemplo, Stockton, California,la ciudad natal de Díaz. Sí, Stockton se declaró en quiebra, pero fue en 2012. La ciudad se enfrentaba a un déficit de 26 millones de dólares, recortó las pensiones y vio cómo los primeros intervinientes perdían prestaciones mientras esperaban durante horas los refuerzos. Es una ciudad que cultivó la resistencia por necesidad.
Así que cuando un concursante de un reality show -un tipo de Rusia- pensó que sería divertido tenderle una emboscada a Díaz para “hacer buena televisión”, malinterpretó el encargo. Esto no es un plató de Hollywood. No te acercas a un nativo de Stockton -especialmente a un experimentado luchador de MMA de talla mundial- y empiezas a hablar por los codos.
Porque tanto si es una persona como si son cien, puede que te den una bofetada.